En el mundo del diseño gráfico, la preimpresión digital es un paso que puede pasar por desapercibido, ya que es un paso que se suele hacer más dentro de las imprentas. Sin embargo, es un paso importante que se tiene que tener muy en cuenta antes de enviar los archivos finales a impresión para que el producto final sea como queramos.

Anteriormente, hemos visto qué es la producción gráfica y los procesos de esta, y ahí hablamos de la importancia de la preimpresión. En este artículo te explicaré por qué es tan importante no saltarse este paso a la hora de crear un archivo que se va a imprimir.

¿Qué es la impresión digital?

La preimpresión digital es el paso intermedio que se encuentra entre el diseño de un archivo y la impresión del mismo. Es un proceso que se centra en preparar el archivo para impresión y de revisarlo antes de enviarlo para evitar errores en el producto final.

Tareas de la preimpresión digital

Revisión de archivos. Una vez terminado el diseño hay que revisar si el archivo tiene todo lo necesario para tener una correcta impresión. Se debe realizar una revisión de color (CMYK o Pantones), que las resoluciones de las imágenes sea la correcta (300 ppp), que no tenga faltas de ortografía… En general que no haya ningún tipo de error que pueda perjudicar la impresión.

Tratamiento de archivos. Si el archivo no se ha realizado de manera correcta y existen errores, pasaríamos al paso de corregirlos.

Vectores. Si el diseño cuenta con textos u otros elementos gráficos, lo ideal para una buena reproducción es que estos estén vectorizados.
Modo de color. Cambiar las imágenes de RGB a CMYK o si están en blanco y negro a escala de grises. Esto último se suele realizar para disminuir la cantidad de tintas que se van a utilizar en la impresión y no haya aberración cromática.
Resoluciones. Como he dicho anteriormente, cambiar las resoluciones de las imágenes a 300 píxeles por pulgada.
Tintas planas. Teniendo en cuenta en que material se va a imprimir y cuantas tiradas va a tener, escoger una tinta plana para ahorrar en tintas y que el color sea más fiel a la marca.
Sobreimpresión. Sobreimprimir las tintas planas para que en la impresión no deje ningún hueco blanco.

Maquetación e imposición. Dentro de la preimpresión digital también entra revisar que la maquetación del archivo sea correcta. Por ejemplo, revisar que la portada de un folleto este en la hoja que le corresponde, que el archivo tenga sangres, que el reverso de un folleto no se imprima boca abajo… Errores que se pueden evitar si se hace una maqueta de como quieres que quede antes de realizar el diseño.

Impresión de prueba. Antes de realizar la tirada final del archivo, es necesario realizar unas pruebas de impresión para comprobar que el producto final va a quedar bien. Para comprobar el color, la posición, los tamaños y otros errores que se puedan ver mejor en papel.

Exportar y enviar archivos. Finalmente, una vez revisado a conciencia el archivo final, hay que exportarlo en un formato adecuado para su impresión. Lo más recomendable siempre es exportarlo en PDF con todos los elementos vectorizados. Una vez exportado, se puede realizar otra revisión antes de enviar a impresión. Abrimos el archivo en Adobe Acrobat le damos a Todas las herramientas > Usar la producción de impresión > Vista previa de salida y podremos ver que no se nos escape ningún color y ningún archivo RGB.

¿Qué diferencia hay entre preimpresión digital e impresión gráfica?

La diferencia principal entre la preimpresión digital y la impresión gráfica es que la preimpresión es el paso anterior a la impresión, como ya he comentado anteriormente. La preimpresión se centra en la revisión de los archivos y la impresión en la reproducción de estos. Los dos se necesitan mutuamente para una correcta impresión, pero en la impresión gráfica entran conocimientos sobre como imprimir en diferentes sistemas de impresión: offset, serigrafía, digital, flebografía, huecograbado, tampografía…

Conclusión

La preimpresión es un paso muy necesario que no deberíamos saltarnos nunca, ya que una revisión precisa hace que posteriormente la impresión sea más fiel al diseño que se ha realizado. Sin este paso, hay muchas más probabilidades de que el producto final tenga algún tipo de error y echemos tiempo y dinero a perder.

Ahora ya sabes todo lo que necesitas para conseguir un producto final lo más fiel posible a tu idea principal. Espero que te haya ayudado a mejorar tus procesos de producción ¡Hasta la próxima!